El académico Salvador Gutiérrez Ordóñez analiza en un reciente artículo el fenómeno de la tilde diacrítca y su aplicación a casos como los de solo y los demostrativos.
En el trabajo titulado «Sobre la tilde diacrítica en solo y en los demostrativos» Gutiérrez Ordóñez realiza un recorrido por las publicaciones ortográficas académicas para abordar la noción de tilde diacrítica desde todas las dimensiones que intervienen en su naturaleza y aplicación: las causas, las condiciones, las características, los criterios, así como el espectro de casos a los que se aplica y el grado de normatividad que rige su uso
La tilde diacrítica se creó para diferenciar palabras tónicas de palabras átonas que son idénticas en la escritura (dé/de, sé/se, él/el). La tilde introducida para distinguir los pronombres de los adjetivos demostrativos (RAE: 1870) y el adverbio del adjetivo solo (RAE: 1880) no se ajusta a esta regla, pues opone dos palabras tónicas. La Academia ha mantenido el uso de la tilde en estos dos casos como máximo en situaciones de posible ambigüedad. En este trabajo se propone restringir su uso para diferenciar únicamente palabras tónicas de palabras átonas. Por un lado, las situaciones de real anfibología son escasas. Por el otro, la aplicación del criterio de posible ambigüedad nos llevaría a multiplicar los casos de tilde diacrítica de forma incontrolada.